La senadora Eugenia Gil, candidata a Presidente del Comité de Distrito de la Unión Cívica Radical por la Lista 123 para las elecciones internas del próximo 6 de octubre, hizo referencia a cuestiones inherentes a esa disputa intestina del radicalismo de la Provincia de Buenos Aires en la que confrontan dos proyectos: uno encarnado por el senador porteño Martín Lousteau - con representación en Bragado a través del grupo que la enfrenta en la próxima contienda - y otro por su par bonaerense Maximiliano Abad, en el que se referencia la convecina legisladora.
Por otra parte ratificó que el lugar de votación en la planta urbana será en la sede del Comité de calle Brown a pesar del pedido de la lista opositora que consideró que utilizaba el lugar como sede partidaria.
"Le envié un mensaje a Lamazón para que ponga sus propios presidentes de mesa y que se sume con su local partidario en el lugar en común para todos los radicales. Que done el canon de alquiler de su local a una institución", dijo.
“Un partido tiene que crear un sueño, una meta, un proyecto”, definió Gil y al afirmar: “en eso estamos” señaló que “hemos creado distintas Comisiones que piensan el Bragado del futuro y cuyos trabajos han merecido la atención de los medios de comunicación locales, no sabe quien no se interesa o porque lo dice adrede o porque no vive acá en Bragado, en Presupuesto, Obras Públicas, Desarrollo Sustentable, Salud, Políticas Sociales, Deportes, Personas Mayores, Personas Discapacitadas y, ahora, vamos a crear una específica para las localidades rurales porque no podemos desperdiciar la experiencia en gestión, en conocimiento o en administración de Raúl Caligiuri, Roberto Macchello o María Pascual o la militancia de Maxi Mel, las Hermanas Gazzotti, Susana Rosales, Susana Sariego Sandra Cosma, la gente de O’Brien o de Mechita, más allá de su pertenencia a tal o cual sector interno; en todos los temas hay al menos una propuesta”.
Añadió: “Como dato, en este tiempo, ha sido nuestra representación en el Concejo Deliberante y en el Consejo Escolar la que impulsó lo que, para mí, son los dos grandes proyectos de futuro, entre las cientos de cosas en las que han trabajado en su mandato con el apoyo del Comité y otra cantidad de gente, claro, y son: la puesta en valor de la que fue la casa del mayordomo de la Escuela Normal, en su momento, para el funcionamiento del aula de prácticas de la Licenciatura de Enfermería, una iniciativa liderada por nuestro consejero escolar Matías Legazpi, y la Ordenanza sobre Régimen de Promoción de la Economía del Conocimiento promovida por nuestra concejal Lilián Labaqui que, de paso, digo que espero que el Intendente Barenghi la incorpore al Presupuesto de 2025 para su implementación con vistas al porvenir”.
La interna “no es sólo ofenderse por las redes ni discutir por cargos, la interna es otra cosa; nosotros queríamos una lista única y teníamos conversaciones con dirigentes importantes y destacados del partido, incluso con nombres propios, y nos obligaron a concurrir al comicio”, aseveró la legisladora, agregando que “entonces hay que dar muestras de ejemplaridad y de austeridad; no podemos andar malgastando en alquilar locales para la interna y en el pago de los servicios que ellos suponen cuando hay sectores de la comunidad, como los jubilados con quienes estamos y estaremos siempre, que no llegan a fin de mes ni a pagar alquileres, la luz, el gas, los remedios, comida o indumentaria, y cuando tenemos una sede, como ningún otro partido en Bragado, con sobrado lugar para albergar la actividad proselitista de todas las listas oficializadas para la elección del 6 de octubre, en un marco de respeto, de cordialidad, consideración y correligionareidad del que la UCR local tiene sobradas muestras en su historia, ni interrumpir la prestación del servicio educativo, que es esencial en nuestras convicciones doctrinarias, para la llevar a cabo una elección interna que sólo nos interesa a los radicales”.
“Como Ernesto en los 90 y Orlando en los 2000, (NR: aludiendo a los Intendentes Ernesto Figueras y Orlando Costa) hay que prepararse para gobernar el Distrito en la segunda década del siglo XXI, crear una ilusión: la de una ciudad y un distrito más habitable y más humano”, dijo, asegurando que “la ilusión política, cuando es colectiva, puede tener un gran efecto movilizador porque genera una energía de esperanza, basada en las expectativas que se mueven en el terreno de las emociones y las vivencias”.
“La ilusión es una poderosa fuerza que hace creer y soñar, es un combate contra el fatalismo, el determinismo y la parálisis, mueve, levanta, une y, cuando es compartida, es un coro de motivaciones políticas muy estimulante. Vivir las ideas, sería la síntesis de nuestra propuesta”, continuó afirmando la candidata de la Lista 123 para presidir el Comité de la Unión Cívica uRadical distrital.
Preguntada por los desafíos que impone a la acción partidaria este tiempo histórico en que vive el país aseguró: “Creo que los retos de la política democrática y su renovación de prácticas, formas y valores reclaman de una vivencia más emocional e intensa del hecho político”.
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