El gobernador bonaerense Axel Kicillof anunció un nuevo aumento para el personal docente que supera los acuerdos paritarios avalados por la Casa Rosada. El beneficio fue rechazado por la FEB, que convocó a un paro. El Gobierno respondió con una advertencia: “Se les descontará el día a quienes no trabajen”.
Kicillof logró cerrar un nuevo acuerdo salarial con la mayoría de los gremios docentes de la provincia de Buenos Aires, pero el anuncio quedó opacado por la decisión de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), el segundo gremio en cantidad de afiliados, que consideró “insuficiente” la propuesta y convocó a un paro para este martes. La respuesta del Gobierno provincial no se hizo esperar: advirtió que se descontará el día a quienes no concurran a trabajar.
“Frente a las dificultades que genera la recesión, el ajuste y la quita de recursos del Gobierno nacional, mantenemos firme nuestro compromiso de proteger los derechos de quienes hacen un gran esfuerzo diario por nuestra provincia”, escribió Kicillof en su cuenta oficial de X. Y detalló: “Acordamos con los representantes de los gremios docentes y de la Ley 10.430 un aumento salarial del 10% respecto a los haberes del mes de marzo, que se llevará adelante en dos tramos: un 6% en mayo y un 4% en julio, con el compromiso de reabrir las negociaciones en agosto”.
El anuncio se produce en un contexto en el que el Gobierno nacional viene habilitando aumentos más bajos para los gremios nacionales, y luego de semanas de tensión entre los gobernadores y la Casa Rosada por los fondos que Nación retuvo a las provincias.