Escribe José María Mendez Susseret- El Periodista del Pueblo
Por estas horas, en el ámbito del Concejo Deliberante de Bragado, se pudo observar algunas actitudes de un sector del Frente de Todos que no ha hecho nada más y nada menos que demostrar que cuando el odio y el egoísmo se hacen presente, no dejan ver la política.
Me refiero concretamente, a las diferencias que existen en el Sanpedrismo sin San Pedro.
Asumieron los nuevos concejales, en la tarde del martes y parece ser que el sanpedrismo por ese odio y egoísmo que reina en este sector ha perdido terreno en el primer día con sus nuevos concejales, solo con la idea de no entregar ningún cargo a quienes salieron segundos en las internas.
Por ejemplo, entregaron la secretaría administrativa que estaba en manos de Natalia Canaparo, que cuando ingresó al cuerpo para ocupar dicha secretaría lo hizo a través de Ramiro San Pedro.
Perdió la secretaría y la dejó en manos del sindicato de Camioneros, es decir, hoy la ocupa Rocío Barrios, una joven abogada y de familia peronista propuesta por Sergio Broggi
entregado también la presidencia del bloque al durettismo (tercero en la interna PASO) puesto que dicho cargo será ocupado por el concejal Germán Marini y solo se ha quedado con la vicepresidencia del Concejo, un cargo prácticamente sin poder alguno e inexistente que hoy es ocupado por la edil reelecta, Natalia Schillizzi.
Como si todo esto fuera poco, por la actitud egoísta del sanpedrismo, para impedir que quien salió segundo en la interna (PASO) el sector del Chapu Fernández le quedara cargos para ocupar, se daría el gusto de perder dos concejales, hablamos del doctor Fernando Maidana y el flamante concejal, Daniel Disanti que estarían pensando en hacer un bloque aparte.
Por estas actitudes, hoy muchos comprenden por qué Vicente Gatica, se dio el gusto de ganarle al peronismo unido. Cuando un gobierno, tiene en frente, otro sector inferior y con menos ideas que el que gobierna, suceden estas cosas, como pasó en Bragado