En medio de la pandemia de coronavirus, cuando el hombre se esconde, aparecen y se reproducen animales de especies que no se dejaban ver. Muchas son las especies que hicieron su “magistral” aparición en distintos puntos de la Provincia y, si hablamos de especies locales, podemos nombrar a las liebres y las perdices, que hace ya muchos años que no se dejaban ver por la región. El ruido, la polución, el andar diario del hombre hace que se vayan ocultado o corriendo de su hábitat natural.

Ante el encierro de los humanos por la pandemia de coronavirus, varias especies de animales llegaron a lugares impensados. El fenómeno por la cuarentena se vio en todo el mundo y también en la provincia de Buenos Aires tuvo su correlato.

Según precisa un portal de la ciudad de Junín, cazar perdices requiere de una técnica y un tesón que se cultiva con los años. El perdicero debe aprender a escuchar el campo, ya que la perdiz termina siempre escondiéndose para eludir la persecución.

En tanto, otro de los animales más buscados para cazar en los campos son las liebres, cuya carne es muy buscada entre los pobladores de Bragado y la zona, especialmente para la confección de escabeches.

Sin embargo, ambas especies son difíciles de encontrar porque el avance de la urbanización ha ido corriendo a las especies y no se dejan ver tan fáciles como hace veinte años. Hoy, producto del aislamiento y la falta masiva de circulación, han vuelto.